Planeta Ácido

"La resistencia a modificar conductas nocivas resta energía a la existencia de vida..."

Opinión No. 140 viernes 11 de enero 2019

Por Marisú Ramírez
(Texto y foto)

Por qué la insistencia por aniquilar a nuestro planeta. Volver ácida a nuestra morada y a nosotros mismos, lleva a desequilibrar la vida a la extinción plena.

Encontré una opinión de la terapeuta española, Rosa Gutiérrez Bejarano la cual de alguna forma expuse hace poco tiempo en una de mis colaboraciones entregada a este importante diario, solamente, ésta va a lo general:

“La tierra está sufriendo terremotos, erupciones volcánicas, inundaciones, incremento masivo de microorganismos. Las catástrofes de la naturaleza van aumentando en todo el mundo, a la par que se está produciendo el peligroso cambio climático. Nuestra casa el Planeta Tierra está adquiriendo un PH ácido y sus habitantes se resienten”

La resistencia a modificar conductas nocivas resta energía a la existencia de vida, se crean severos desequilibrios en todo ser viviente a través de bacterias y virus desconocidos, lo que aniquila la vida cada vez de forma más acelerada. Padecimientos antes impensados hoy existen y se acrecientan, todo por culpa de la acidez. 

Así encontré esfuerzos científicos por proteger a la tierra desde propuestas concretas como la planteada recientemente en medios informativos:

El calentamiento global es un problema que ha dejado a los científicos buscando soluciones radicales para controlarlo. Una de las propuestas es la creación de un escudo artificial, que enfriaría la Tierra al disminuir la cantidad de luz solar que entra al planeta. 

Esta idea, planteada por investigadores de la Universidad de Harvard, tiene como nombre: Experimento de Perturbación Estratosférica Controlada (SCoPEx), y de acuerdo con la BBC, se trata de lanzar un globo a 20 kilómetros de altura que soltaría una carga de polvo de carbonato de calcio para fumigar la atmósfera, funcionando como una especie de bloqueador solar.  

Los científicos esperan que con SCoPEx puedan crear un escudo hecho de partículas protectoras que consigan rebotar la radiación hacia el espacio. Sin embargo, para comprobar su efectividad, tendría que ser probado en el mundo real porque hasta ahora la idea sólo ha sido simulada en computadora.  

Pero este "escudo" también podría traer varios problemas. El investigador del Departamento de Agricultura de la Universidad de California en Berkeley, Jonathan Proctor, señaló que bloquear la luz solar que entra a la Tierra "podría afectar el crecimiento de las plantas". 

Otros expertos señalaron que también puede afectar los patrones de la lluvia, ocasionando más sequías.  Alan Robock, profesor del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Rutgers, dijo a BBC que la única manera para combatir el calentamiento global es "dejar de usar la atmósfera como una alcantarilla para nuestras emisiones de gases de efecto invernadero". 

Me permití citar textualmente para dejar constancia de la preocupación por salvar al planeta, como también lo ha enunciado la Iglesia Católica a través de la encíclica Laudato si:

Convoca a cuidar la casa común, la Tierra. Pero ese cuidado tiene un objetivo concreto y poco plazo, y por eso es dramático: mitigar el cambio climático que está poniendo en peligro no la existencia de la Tierra como planeta de sistema solar, sino la Tierra como lugar donde ha sido y es posible la vida. Cuidar la casa común es cuidar la vida en la tierra y esto implica salvar la humanidad y evitarle enormes sufrimientos.

El sentido de esta propuesta es eminentemente el llamado a toda la sociedad, recoge el pensamiento de otros vicarios de Cristo, en 1971 Pablo VI expresó (Octogésima adveniens): “Debido a una explotación inconsiderada de la naturaleza, (el ser humano) corre el riesgo de destruirla y de ser, a su vez víctima, de esta degradación”. 

San Juan Pablo II llamó en su momento a conformar una conversión ecológica global en el mismo sentido “salvaguardar las condiciones morales de una auténtica ecología humana” ahora desarrolladas por el Papa Francisco.

Lo que se extingue es la vida y no habrá forma de recuperarla, el mejor propósito de todos este año, tendrá que ser salvar al planeta. masryram@msn.com