jueves, 10 de abril de 2014

La Familia

Opinión No. 4, sábado 7 diciembre de 2013

Por Marisú Ramírez

Tal vez uno de los temas jurídicos por antonomasia más apasionantes por la cantidad de situaciones que se desprenden, tanto como institución social, por su principal finalidad: compartir un estado de vida para la búsqueda de la realización personal y la fundación de una familia, la que constituye el medio natural para el desarrollo de las interrelaciones de responsabilidad y solidaridad humana; como  por los vínculos que se derivan de tal unión, y que son inherentes a la pareja, es el del matrimonio.

En términos estadísticos, las cifras arrojadas por el INEGI entre matrimonios y divorcios son más que elocuentes, al 2011 se registraron 570 mil 954 matrimonios, en 2010 fueron 568 mil 632 y en 2009 la cifra se ubicó en 558 mil 913. Contrariamente a lo que se piensa, los matrimonios van a la alza y los divorcios también: al 2011 se registraron 91 mil 285 divorcios, en 2010 fueron 86 mil 042 y en 2009 la cifra se ubicó en 84 mil 302.

Ahora bien, reflexionando un poco, es menester analizar en qué estamos fallando las parejas. Según una investigación realizada en México por Andrea Limón Fonseca, y publicada en la Quarterly Review de la Universidad de las Américas (UDLA), son cuatro los factores que determinan que un matrimonio confluya en la disolución definitiva: la falta de comunicación, la infidelidad, la violencia y los problemas económicos.

Mientras no exista una buena comunicación, habrá reconciliaciones poco duraderas en la pareja, porque repetirán las mismas fallas, lo que las hace caer en una falsa tolerancia, debido a que propicia que cada uno viva su vida en forma independiente.

Infidelidad

Limón Fonseca menciona que “…la infidelidad es el resultado de las crisis de la pareja, y esta no es solo sexual, pues el cónyuge infiel busca aspectos que su pareja no le brinda y estos pueden ser intelectuales, físicos y/o emocionales. Cuando existe infidelidad, la víctima presenta una serie de sentimientos negativos hacia su persona. Al descubrirse la infidelidad, es natural que se llegue a sentir dolor, pérdida de autoestima, angustia y rabia. Al estar experimentando estos sentimientos lo más lógico es que la persona quiera ponerle fin a la relación, sin importar las consecuencias a terceras personas”.

Violencia

Dentro de la violencia existe una situación cíclica que se desarrolla en tres fases, la primera se caracteriza por la acumulación de tensión en las interacciones, en donde existen golpes menores y se incrementan los celos, posesión y opresión.  La segunda se caracteriza por el descontrol y la inevitabilidad de los golpes, en donde la víctima se muestra sorprendida ante la presencia imprevista de estos. Y por último la fase del arrepentimiento. La víctima tiene la esperanza de que el compañero violento cambie, y esto provoca que continúe recibiendo abusos.

Problemas económicos

La investigadora de la UDLA asegura que el nivel educativo de la mujer y su incorporación al mercado laboral tienen una relación negativa, así como también el número de hijos ha sido relacionado de manera inversa o negativa con la disolución de las uniones.
Los sentimientos de incompatibilidad, el cambio de intereses, la injusta división de las labores o el no sentirse románticamente apegado, el  alcoholismo y la drogadicción; son algunos factores que pueden propiciar que una pareja se divorcie.

Falta de valores

Otro factor determinante y que cada día es más frecuente es de los terceros implicados, cada día más hombres y mujeres rompen definitivamente no sólo con sus parejas, sino también con sus familias al involucrarse sentimentalmente con personas del otro sexo más jóvenes. Situación que no siempre conlleva a relaciones duraderas que solamente provocan sentimientos de frustración e inestabilidad emocional, rechazo social y en la mayoría de los casos, terminan en una debacle personal por los sentimientos de culpa que estas situaciones generan.


En la llamada ‘Célula Social’ no se está cumpliendo su principal objetivo, la preservación de la familia. En una de sus visitas a Puerto Vallarta, el padre rector de la UNIVA, Francisco Ramírez Yáñez; se refirió a ella como un ‘Diseño de Dios’ donde pidió que comprendiéramos que “…en el matrimonio ya no son dos sino uno, y el secreto del mismo está en saber si el que convive con nosotros es feliz, no en ver solamente la felicidad propia”. Lo que en otras palabras se puede definir como actuar con responsabilidad y sin egoísmo. En la familia debe buscarse la fidelidad y el afecto como una dignidad, no como un sometimiento de un ser a otro, sino como un perfecto entendimiento sobre los valores de la existencia humana. masryram@msn.com

Libre Convivencia

Opinión No. 3, viernes 29 de noviembre de 2013



Por Marisú Ramírez

Basta con darle una breve mirada a la ley que tras intensa discusión entre los distintos grupos sociales del Estado de Jalisco, entrará en vigor a partir del primer día del año entrante. Denominada “Ley de Libre Convivencia” porque permite que, dos o más personas del mismo o distinto sexo y que viven juntas, celebren un contrato civil notariado para otorgarse ayuda mutua, y puedan adquirir derechos y obligaciones, como seguridad social o heredar bienes, sin tener que recurrir específicamente al “matrimonio”.

Es de llamar la atención que esta figura jurídica podría considerarse como un “Nuevo Estado Civil”  que no puede ser denominado ni como matrimonio, ni como concubinato y para su disolución, tendrá que hacerse con el consentimiento de ambas partes o por vía unilateral, y sin necesidad de demostrar ninguna circunstancia como en el matrimonio, y se tramitará ante notario público sin que se requiera de intervención  judicial. Únicamente se tendrá que realizar una certificación de hechos y se deberá notificar al notario ante quién se celebró la libre convivencia para que se realice  una certificación de hechos.

 La relación económica patrimonial se regirá por el de separación de bienes previsto en el Código Civil del Estado de Jalisco. Lo que se traduce en que los “Libre Convivientes” tendrán derechos y obligaciones, entre los que se incluyen derechos hereditarios, de tutela, de alimentos, de seguridad social y patrimonial.

Los que decidan celebrar este contrato, solamente se deberán presentar ante notario público, con copia certificada del acta de nacimiento; identificación oficial, y en caso necesario, presentar copia certificada del acta de defunción del cónyuge fallecido, del acta de divorcio, copia certificada de la sentencia por ineficacia, invalidez o ilicitud del matrimonio que haya causado ejecutoria, o copia certificada de la disolución o separación de la libre convivencia anterior.

Con esta ley se pone de manifiesto la necesidad de regular las reuniones de personas que sean familiares, parientes, amigos o parejas del mismo sexo; con la única finalidad de brindarles certeza jurídica y que las partes puedan adquirir derechos, pero también obligaciones y con una clara restricción que no permite la posibilidad de adopción, custodia o tutela de menores.

Ley lobo con piel de oveja

La propuesta fue realizada por el diputado Enrique Velázquez de la fracción del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y apoyada por otros legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), de Movimiento Ciudadano (MC) y del Verde Ecologista de México (PVEM); como dato curioso llama la atención que se creó en uno de los Estados considerados más conservadores, donde los detractores de dicha ley consideran que solamente es un paso hacia el matrimonio igualitario. Así se entretejen los telares imaginarios que nos presentan los orquestadores una y otra vez. masryram@msn.com


Pecado Social

Opinión No. 2, viernes 15 de noviembre de 2013



Por Marisú Ramírez

…he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión..., decimos al rezar el Yo pecador. Casi todos consideramos “pecado” algo malo que hemos hecho, y menos común es sentir que pecamos cuando hemos pensado o dicho algo incorrecto, pero, cuando dejamos de hacer algo que deberíamos, pensamos que no estamos cometiendo ningún delito ¡craso error!

Los griegos lo definían como fallo de la meta o no dar en el blanco; para los hebreos, significa errar;  el concepto religioso aún vigente de pecado como ‘delito moral’ alude directamente a la trasgresión voluntaria o involuntaria de normas o preceptos religiosos; en las Sagradas Escrituras se ha entendido el pecado como el alejamiento del hombre a la voluntad de Dios. Otras corrientes  lo definen como una falta contra la razón, la verdad y la conciencia recta, que hiere la naturaleza del hombre y atenta contra la solidaridad humana. Si bien, todo pecado es personal, como acto de libertad de un solo hombre en particular y no propiamente de un grupo de personas.

Pero, ¿qué es un pecado social? La solidaridad humana tan misteriosa e imperceptible como real y concreta, el pecado de cada ser humano repercute en cierta forma en los demás. Por ello, cuando se habla de faltas a la ética o a la moral colectiva,  donde existen denuncias a determinadas situaciones o comportamientos colectivos de grupos sociales, o de tendencia generalizada por la acumulación y la concentración de muchos pecados personales; estamos hablando de “Pecados Sociales”. El Vaticano ha actualizado la lista exhibiendo una atención especial a éstos, cuya comisión va en contra de la Justicia en las relaciones entre persona y persona, entre la persona y la comunidad, y viceversa.

Según Jorge L. Beléndez, el pecado social se crea ”…cuando se favorece o se explota la iniquidad, la injusticia, la maldad. Cuando se puede hacer algo por limitarlo, evitarlo, eliminarlo como mal social, ya sea en forma de injusticia, corrupción, negligencia, irresponsabilidad, o cualquiera otra forma, pero no se hace por pereza, miedo, complicidad activa o pasiva, coparticipación, comodidad, conveniencia, por equivocadamente pensar que nada se puede hacer ante la magnitud del pecado o el pecador, cuando se le huye a las consecuencias y el sacrificio de hacer lo correcto, ese es el origen, el germen, del pecado social.”

La Omisión

La falta de compromiso de los diversos sectores sociales que saben lo que tienen que hacer, pero no lo hacen; si bien es cierto, los esfuerzos gubernamentales son pocos, pero la participación ciudadana es escasa o prácticamente nula. La responsabilidad debe ser compartida, las implicaciones sociales por omisión tienen un alto costo, el número de víctimas crece de forma impresionante y los infractores continúan impunes.

Esto tiene serias implicaciones para todos, los que conformamos la sociedad; la cual debe ser, siempre, una fuerza activa y visible, protectora y guardiana de los más débiles. Si logramos entender que no hacer lo bueno es tan condenable como hacer lo malo y dejar de vivir creyendo que con hacer lo que nos toca o evitar realizar algún mal, con ello nos hemos ganado el cielo. Démonos cuenta que estamos haciendo lo que no nos cuesta, y de esta forma somos igual que los demás, es más valioso marcar la diferencia, siendo más participativos, dejar la apatía de lado, la falsa creencia de que nosotros no podemos hacer nada y dejar que las autoridades sigan con sus esfuerzos vanos, consideremos que la diferencia está en que nadie es más fuerte que todos juntos.

Congreso Vs Trata


Bajo el lema “Construyendo puentes de enlace: Gobierno, Sociedad y Academia” y con el claro objetivo de estrechar lazos de colaboración entre los distintos sectores sociales, se abre el foro: Estrategias en pro de las niñas, niños y adolescentes contra la esclavitud moderna, además del taller impartido por la Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia, ODI, A.C. donde se promoverán las pautas, estrategias, programas, modelos y sobre todo las acciones que se implementarán para la prevención, atención, investigación y protección jurídica de los niños  y adolescentes. Lugar Hotel Crown Paradise, fecha 21 y 22 de noviembre.  www.puertovallartavstrata.com o masryram@msn.com

miércoles, 9 de abril de 2014

El secreto de Islandia





Opinión No. 1, viernes 8 de noviembre de 2013

Estar de vuelta es gratificante, después de lo que me pareció una eternidad sin escribir una línea en los medios de comunicación.  Apenas 18 meses, casi nada; la realidad es que todo llega en su justo momento, no antes, ni después. 

La invitación llegó con un suave aroma, de ese olor que solamente las letras pueden inspirar; del mismo modo llegó el nombre de esta colaboración, se los dejó a la imaginación… Una verdadera noticia para las mujeres de nuestro país: Todo comenzó el 24 de octubre de 1975 en el país nórdico de Islandia, donde las mujeres decidieron “tomar el día libre”  para llamar la atención sobre sus bajos salarios y la falta de reconocimiento a su rol en la sociedad. Nada menos que el 90% de las mujeres del país se sumó a la protesta y se congregó en actos públicos.

El resultado: Islandia es, por quinto año consecutivo, el país número 1 en equidad de género, según el ránking anual del Foro Económico Mundial, donde México subió cinco puestos en el índice de brecha de género mundial 2012, al ubicarse en el sitio 84 de 135 países evaluados. Esto debido al aumento de mujeres en cargos ministeriales que se elevó del 11 al 21% aunado a una ligera mejora en la igualdad de salario percibido.

En América Latina, destaca Nicaragua como el país de la región mejor ubicado en el ranking mundial, al ocupar el puesto 9, y Brasil que avanzó 20 lugares gracias a las mejoras en la educación primaria y a la cantidad de mujeres en puestos ministeriales, ya que el “Informe de brecha de género mundial” evalúa los países en función de su capacidad para cerrar la brecha de género en cuatro áreas fundamentales: Participación económica y oportunidad; Educación; Participación política, y Salud y supervivencia.

Ahora bien ¿cuál es el secreto de Islandia, para considerarse el mejor país del mundo para ser mujer? Según Annadís Rudolfsdottir, del BBC Mundo, la clave está en las “guarderías” como un factor para crear en la sociedad una estructura para que las mujeres puedan desempeñarse de manera libre en cualquier ámbito económico, donde el 82.6% de las mujeres islandesas son económicamente activas y constituyen el 45.5% de la fuerza laboral del país nórdico, donde además tienen una de las tasas de fertilidad  más altas en Europa, con 2.1 niños por mujer.

¿Cómo lo logran?

La explicación está en parte en otro de los cambios legales logrados en Islandia: la larga licencia por paternidad. Si, leyó usted bien “licencia por paternidad” en total la pareja tiene nueve meses de licencia luego del nacimiento del bebé, de los cuales, tres meses son exclusivos de la mujer, tres exclusivos del padre y otros tres pueden dividirse como la pareja quiera.

Esa licencia se toma con hasta 74% del salario. El padre y la madre pueden tomar más licencia, pero con una reducción salarial acorde. Otra de las claves, es el fácil acceso a  guarderías infantiles de bajo costo administradas por el Gobierno.   
Mujeres y legisladores…se los dejo de tarea.




Bienvenida

Este es un espacio donde encontrarás reflexiones de diversos temas de interés social.