octubre
de 2016
Nunca podrás escapar de tu corazón, así que es mejor que escuches lo
que tiene que decirte…
Paulo Coelho
Coincidir en el tiempo y
el espacio requiere un gran movimiento de energía, acontecimientos e inclusión
de personas determinantes e incluyentes de experiencias que pondrán de
manifiesto y sin lugar a dudas que se tiene una pareja cósmica. Lo que en otros
términos se define como formar parte integral de dos chispas divinas que se
unen por una misión concreta y donde intuitivamente late dentro la necesidad de
encontrarla.
La negación de este hecho
lleva a dos seres directamente hacia el odio. Se utiliza activamente la
sexualidad desligada del sentimiento y se cansan de compartir sus cuerpos con almas
que no les complementan, porque no están unidos desde el espíritu. O bien, separados
por circunstancias adversas e intrusos que enamoran cuando sienten que han
encontrado el mejor objeto disponible en el mercado y que por motivos insanos destruyen
la relación de una pareja cósmica. Al respecto, el filósofo griego Empédocles, en
su Teoría de las cuatro raíces hace referencia a “La fuerza que hace que dos
seres se atraigan en contraste con el odio que los separa”.
Cuando una pareja cósmica
se encuentra, el camino de reconocimiento y fusión puede tornarse muy sinuoso, –algunas parejas no superan la prueba–
hasta que finalmente se da el desprendimiento definitivo o la fusión eterna. Es
por esta razón que algunas parejas después de estar separados, se sienten en
completa desarmonía y terminan por reencontrarse. Su unión se vuelca en un
matrimonio sagrado donde la pareja seguirá con plena conciencia su
conocimiento, exploración, transformación y descubrimiento del otro, creando un
vínculo indestructible; ya que de esta unión – sin hacer nada más– se está
ayudando a la humanidad a través de toda esa luz-energía-información que se
expande en forma de ondas por el universo; esa es la verdadera intención al
crear estas chispas divinas que en algunos textos sagrados son llamados los elegidos o “Gutas” de la
humanidad, en la cultura popular oriental se conoce como la leyenda del hilo
rojo del destino; en algunas otras, se dice que es un hilo dorado o “filamentos
de luz” y traen consigo una enorme cantidad de energía positiva que en el
sentido sensible se podría considerar “La Energía del Amor” esa es la misión de
la pareja cósmica, la manifestación plena de la creación de esta energía
sublime como principio universal, la energía cósmica que da origen; de estas
uniones nacen a su vez las nuevas chispas divinas que continuarán la cadena de
ondas expansivas y generadoras de amor en el mundo.
Por otra parte, cuando
una de las partes se niega a la integración, ya sea porque las tentaciones del
mundo son muy fuertes y adictivas o por simple libre albedrío; la otra queda
devastada, no existe ahora la necesidad de ser amada, porque para superar la
alienación se ha tenido que reconciliar con su propia soledad y su propia
identidad, por lo que se genera un detonante de auto destrucción en todos sus
sistemas de sobrevivencia y no hay fuerza que la salve de la aniquilación, su
razón de ser ya no existe más, su búsqueda ha terminado. masryram@msn.com
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