Tardío incorruptibilis

 

Por M en E Marisú Ramírez

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador comentó en días pasados en su tradicional conferencia matutina sobre lo que podría ser el escándalo del año en México, sobre la detención en E.U. del extitular de la Secretaría de la Defensa Nacional “…Le tengo toda la confianza al actual secretario de Marina y al general secretario Sandoval. Me tocó elegir a los dos, hice un análisis detallado para tomar la decisión de nombrarlos, investigué sobre sus antecedentes, sobre la honorabilidad y los dos se caracterizan por ser incorruptibles”

Al respecto, llamó mi atención el adjetivo que utilizó López Obrador para referirse a los encargados de defender la integridad, la independencia y la soberanía de nuestro país, refiriéndose a ellos como “pilares del Estado mexicano, son tan fuertes que ni estos asuntos tan lamentables, como es el involucramiento de un secretario de la Defensa en casos de narcotráfico, las debilitan”.

Si bien es cierto, nuestro país mejoró su posición en el Índice de Corrupción de Transparencia Internacional y se ubica en la posición 130 de 180 países evaluados por el organismo, mejorando 8 posiciones respecto al 2018, lo cual es una excelente noticia.

Hasta aquí el contexto, pero… ¿qué significa ser una persona incorruptible? y otra cuestión más ¿es posible ser una persona incorruptible en estos tiempos y en un país como México?

Al respecto, se podría considerar que un “tardío incorruptibilis” no se deja comprar, seducir o llevar por la corriente; en otras palabras, es una persona íntegra, honesta, justa, libre, insobornable, honorable, auténtica, fiel a sus principios y que confía en sí mismo.

"De igual manera definiremos lo corruptible y lo incorruptible; en efecto, si una cosa previamente existente ya no existe o puede no existir, decimos que es corruptible, tanto si se destruye y cambia alguna vez como si no” estas no son mis palabras, sino de Aristóteles, el filósofo griego que quiso conocerlo todo.

Por su parte el escritor británico Henry Fielding mencionó que la conciencia es la única cosa incorruptible sobre nosotros; por lo tanto, vencer la tendencia de todos los que piensan que una situación corruptible es normal dadas las condiciones sociopolíticas de un país, puede generar un mayor mérito, al ser llamado incorruptible.  

Por lo tanto, para ser una persona incorruptible, se debe tener temple de acero y voluntad de hierro para no ser arrastrado a la tentación. Llegar a donde la mayoría no llega y hacer lo que la mayoría no hace, en otras palabras, se requiere ser como el salmón, de los pocos seres vivientes que nadan a contracorriente y se crece ante los retos.

Así mismo, ser incorruptible parece algo muy complejo, algo inalcanzable, intangible, difícil de lograr. Podría evocar una perfección muy difícil de sostener y todo servidor público debería tener este atributo.

Por otra parte, el organismo Transparencia Internacional también sostiene que en México prospera la corrupción a pesar del cambio de gobierno, por lo tanto, realizó recomendaciones y mencionó que “aunque detener la caída en el Índice de Percepción de la Corrupción es una señal positiva para México, para revertir la tendencia del último lustro, México debería:

Consolidar su Sistema Anticorrupción, particularmente a nivel estatal y en los tres poderes. El esfuerzo por controlar la corrupción debe ser nacional y no sólo de la Administración Pública Federal.

Asegurar el cumplimiento cabal de la publicidad de las declaraciones patrimoniales y de intereses para todos los servidores públicos, especialmente en áreas de riesgo y alto nivel. Cinco años después de la promulgación de una reforma constitucional para cumplir con este fin, los sistemas de declaraciones patrimoniales y de intereses exhaustivos y públicos se sigue posponiendo.  

Asegurar una Fiscalía General de la República autónoma e independiente, con controles democráticos efectivos para evitar su uso selectivo o político. Uno de estos controles democráticos es la creación de una política de persecución penal, discutida ampliamente con la sociedad, en materia de control de la corrupción. masryram@msn.com